Creo que todos elegimos la dictadura liberal y por eso estamos aquí.
Somos libres de irnos a vivir a China, India, Cuba o Arabia.
Y aquí vivimos.
Ocurre que en una dictadura económica el dinero también puede dar libertad e independencia, a quien lo tiene claro.
Y a eso nos agarramos, a poder tener más para intentar depender menos.
Conseguirlo o no depende de la inteligencia personal, que parece que tampoco abunda, tal vez porque en realidad es un error, atractivo, pero un error. Nos atrapamos en el mecanismo de intentar despegarnos.
Es como vivir sobre arenas movedizas.
La mejor formula de libertad e independencia seguramente sea el desapego. Que te importe todo una mierda. Corres el riesgo de que te importe una mierda tu propia vida, claro.... aunque seguramente no vale mucho más.
Para ganar un poco de autoestima personal están las religiones y para sobrellevarlo los agnósticos las drogas. Está todo previsto.
Logicamente a quien tiene menos o nada la diferencia entre uno y otro sistema le puede resultar indiferente. Salvo porque en una dictadura económica no es necesatario matar para sobrevivir ni vives con el miedo de que te maten los demás o los propios dictadores.
Los miedos son otros, más livianos y más sicológicos, si los comparas con sentir un tanque apuntando a tu puerta, una automática a tu ventana o una pistola a tu sién.... hasta estamos felices. Sobre todo los psiquiatras.
En definitiva que vivimos atrapados en un sistema que aprieta pero no ahoga, que te tortura en un cómodo sillón, que te amenaza con buenas palabras que te himnotiza con bellas imágenes y que te vende cualquier cosa que desees, en esas condiciones es muy facil confundir la realidad y creer en la libertad.
Y aquí estamos.
A mi me consuela poder conservar la libertad de discernimiento. Reconocer que es así y aceptarlo, o no, y largarme al Tibet. Pero si lo reconoces y lo aceptas lo afirmas.
"Si soy un capullo, burgues capitalista y acomodado, como el resto y un poco cabrón además".
¿Y tu, que eres, distinto a caso?. No majete, no eres igual que yo, igualito, vivimos lo mismo.
Esos que van dándoselas de divinos, de elitistas, de sabios, de especiales, de únicos me repatean el ocico.
Lo peor es vivir en la ignorancia, la cobardía o el autoengaño.
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Marcelo, yo la paradoja de que se de tal infelicidad en estados de bienestar como los paises nórdicos siempre la he atribuido a condiciones climáticas y de entorno.
Eso de tomar cañas y poder salir de tapas, copas o cachondeo a cualquier hora del día y de la noche es jodido sostenerlo con un clima que no sea mediterraneo o tropical.
El entorno y el clima moldean claramente el caracter de los habitantes, eso es evidente a poco que viajes, y compares, la temperatura y la luz influyen directamente en los estados sicológicos de las personas.
Aparte de que la herencia de la moral calvinista que subyace en las costumbres de los paises noreuropeos es muy, muy dura, hay mucha hipocresía encerrada.
“No es señal de buena salud estar bien adaptado a una sociedad profundamente enferma”